Aunque sé que esa fué una de las mañanas más tristes de mi vida, que muchas ideas me zumbaban la cabeza. Muchas ideas de futuro se caían como la arena que está metida dentro de un reloj. Hoy pude levantarme.
Supe, confié, imaginé que todo eso me haría ser mas fuerte. Que todo eso me haría no tener mas miedo al éxito, ya que no tenía mucho para perder. Hay más por ganar que por perder cuando tu familia y tus amigos estan acompañandote.
Hoy confió en eso. Amo con todo mi corazón esa idea. Adoro pensar que voy caminando hacia el lugar donde toda mi infancia y mi adolescencia quise estar.
Lo malo no se tapa, se cristaliza. Se hace visible, tanto que no puedo ponerme una careta tapando lo que me pasa. No me permito hacerme esas preguntas que me lastiman más. Eso no me sirve. Quiero otra cosa, sé qué, para allá voy.
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