Sólo un par de horas alcanzaron para conocer un poco más porque cierta gente se comparta de una manera y nosotros también.
- Saber que por más buena onda que hayas puesto en redactar esa entrevista, el otro quizás entienda todo al revés y crea que hasta hay intencionalidades ocultas. (?)
- Interiorizar (de la boca para afuera todos lo hacemos) que la sexualidad de una persona, no te da derecho, a menospreciar su capacidad de trabajo o quizás prenderte en esa misma crítica que te haya hecho.
- Quedarte un segundo mudo cuando alguien con quien chateas te dice en un momento que sale con alguien y a los minutos te tira frases onda: "me gusta que te guste" o "yo tarareo la canción, mientras vos la cantás". (?) No me gateen!
Por lo visto, algunas mañana son más productivas que otras.
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